Evangelii Gaudium --- (Serie II)
6
Ø La comunidad evangelizadora se mete con obras y gestos
en la vida cotidiana de
los demás,
achica distancias,
se abaja hasta la humillación si es necesario, y
asume la vida humana,
tocando la carne
sufriente de Cristo en el pueblo.
Ø Los evangelizadores tienen así «olor a oveja»
y éstas escuchan su
voz.
**********************************
7
v Sueño
con una opción misionera capaz de
transformarlo todo,
para que las costumbres, los estilos, los horarios, el lenguaje
y
toda estructura eclesial
se convierta en un cauce adecuado para
la
evangelización del mundo actual
más que para
la autopreservación.
v La reforma de estructuras
que exige la
conversión pastoral
sólo puede
entenderse en este sentido:
procurar que todas ellas se vuelvan más misioneras,
que la pastoral ordinaria en todas sus instancias
sea más expansiva y abierta,
que coloque a los agentes pastorales
en constante actitud de salida
y
favorezca así la respuesta positiva
de todos aquellos
a quienes Jesús convoca a su amistad.
**********************************
8
Dado que
estoy llamado a vivir lo que pido
a los demás,
también debo
pensar
en una
conversión del papado.
Ø
Me corresponde, como Obispo de Roma,
estar abierto a las
sugerencias que se orienten
a un ejercicio de mi
ministerio
que lo vuelva más
fiel
al sentido que Jesucristo quiso darle
y
a las necesidades actuales de la evangelización.
**********************************
9
v
En su constante discernimiento,
no directamente ligadas al núcleo del Evangelio,
algunas muy arraigadas a lo largo de la historia,
que hoy ya no son interpretadas de la misma manera
y cuyo mensaje no suele ser percibido adecuadamente.
Pueden ser bellas,
pero ahora no prestan el mismo
servicio
en orden a la transmisión del
Evangelio.
No tengamos miedo de revisarlas.
v
Del mismo modo,
hay normas o preceptos
eclesiales
que pueden haber sido muy eficaces en otras
épocas
pero que ya
no tienen la misma fuerza educativa
como cauces de vida.
**********************************
10
Ø
A los sacerdotes les recuerdo
que el confesionario no debe ser una sala de
torturas
sino el lugar de la misericordia del
Señor
que nos estimula a
hacer el bien posible.
Ø
Un pequeño paso, en medio de grandes
límites humanos,
puede ser más agradable a Dios
que la vida
exteriormente correcta
de quien transcurre sus días sin
enfrentar importantes dificultades.
^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^^
No hay comentarios:
Publicar un comentario